jueves, julio 13, 2006

Entrevista a Cazuela de Côndor

- ¿Existe una identidad cultural en Valparaíso?

Ricardo: claro que existe una identidad cultural, de hecho, yo creo que esta identidad esta muy marcada en el puerto, se ve en las ventanas con ropa colgando, en los perros, en los bares, en las calles. Es precisamente la mixtura de gentes lo que le ha dado la particularidad al modo de ser en el puerto.

- ¿Como ve usted que esta se manifiesta en las distintas expresiones artísticas?

R: las personas todas en Valparaíso, son entes catalizadores de lo que la cotidianidad porteña les entrega, puede que sean los artistas, tanto los de acá, como los que llegamos a nutrirnos de la ciudad, los que aportamos para que la pizarra de formas, colores y sonidos que hay, acá aparezcan de formas mas bien plásticas. Es como que se puede hacer música pensando en una banda de perros vagos o pintar todos los colores que tienen las casas del cerro cordillera. Lo que quiero decir, es que el modo que tiene de expresarse esta identidad porteña, es precisamente dentro de esa cotidianidad que nos inunda a todos, desde el grafitero afuera de tu casa, el organillero o la orquesta en el municipal, todos actuando al unísono dentro de un gran anfiteatro.

- ¿En lo musical, hay algo que distingue/caracteriza a la música porteña?

R: lo que te puedo decir con respecto a la música en el puerto es que indudablemente anda algo en el aire que tiene que ver con lo que el puerto es, una mezcla de gentes y culturas distintas, eso se lo tiene por ser PUERTO/PUERTA al mundo. De hecho ninguno de los integrantes de Cazuela de Côndor somos de Valparaíso, todos llegamos desde otras ciudades para hacer música jaca. O sea como que se repite la historia de como se formo la ciudad en el modo en que se forman las distintas cosas acá, como una mezcla, un mestizaje entre lo que tenemos y lo que viene de afuera.

- ¿Se siente usted parte (aporte) de la escena musical porteña? ¿De qué manera?

R: nosotros aportamos mas a la mixtura de sonidos, quizás traemos una especie de frescor a la música (por ahí nos dijeron eso), tenemos una formación no tradicional dentro de las bandas que suenan hoy, por tanto, por ahí la cosa ya es distinta, además que le metemos el humor negro bizarro pelacable, al mismo tiempo que queremos hacer que la gente viaje por pasajes oníricos.

Yo creo que es bien porteño o chilensis el modo que tenemos nosotros de llevar nuestras presentaciones, en el sentido de la talla o la cultura del sobrenombre, a vola’ pelusona o como quiera llamarse, entra en el asunto de reírse de uno mismo, como autocrítica, así lo hacemos con nosotros, con el estado con los demás, para darse cuenta de los errores y crecer espiritualmente al mismo tiempo que se desarrolla la música, por ahí yo creo q la gente engancha. ¿Puede ser ese el aporte? [Risas]

- ¿Como se ve influenciada su música por el hecho de ser creada en Valparaíso? ¿Hay diferencias con expresiones similares de Santiago u otros lados?

Nicolás: obviamente, al componer no nos olvidamos del factor Valparaíso. Sin embargo, no juega un papel fundamental en nuestros temas. Más que nada, lo asociamos a la fusión de nuestra música, ya que desde siempre, Valparaíso ha sido una fusión de culturas por el tema portuario y de los inmigrantes, todo es bien mezclado.
En Santiago la cosa es distinta. Acá se le da harto énfasis a la mezcla de folclore con el rock, en Santiago no tanto...es como si acá el asunto tuviera un sabor distinto. Además, esta el asunto del mar….puede sonar muy cliché, pero el mar es como un constante respiro para el porteño, y eso a la larga genera un estilo de composición distinto.